La conservación de energía es algo en lo que la mayoría de los estadounidenses piensan al construir una casa, comprar un vehículo e incluso cocinar alimentos. La mayoría de las personas han comenzado a reducir realmente los artículos no esenciales, conducir vehículos que no usan tanto combustible y, en general, reducir su huella de carbono. Algunos propietarios y propietarios de negocios están cada vez más interesados en la energía geotérmica como fuente potencial de energía renovable; y por una buena razón.
La energía geotérmica es esencialmente el calor producido naturalmente por la tierra. Es posible para nosotros aprovechar esa energía de diferentes fuentes, como el magma, muy por debajo de la superficie de la tierra, o el agua caliente que está más cerca de la superficie, como las aguas termales naturales. En muchas áreas, incluso los terrenos poco profundos pueden producir suficiente energía geotérmica. El calor del núcleo de la tierra viaja hacia arriba, calentando roca y agua. Este proceso es continuo y es la razón por la que la energía geotérmica es tan confiable.
La capa superior de la superficie de la tierra, que varía de 10 pies a unos pocos cientos de pies, puede producir un flujo constante de energía geotérmica. Esto es menos intenso que las fuentes más profundas debajo de la superficie, pero sigue siendo suficiente para la calefacción y refrigeración de edificios. En muchas áreas, el suelo alrededor de las casas y otros tipos de edificios se puede aprovechar para satisfacer algunas necesidades de energía.
Beneficios de la calefacción geotérmica
El uso de la energía geotérmica ofrece una serie de ventajas. Es altamente eficiente y proporciona ahorros significativos tanto para hogares como para negocios. Reduce la dependencia de nuestra nación de los combustibles fósiles como el carbón y el petróleo, y es 100% limpio. Estos y otros beneficios de la energía geotérmica incluyen:
- Reducción de la huella de carbono: una menor dependencia de los combustibles fósiles es beneficiosa para el medio ambiente. Aprovechar las fuentes geotérmicas es una forma ideal de mostrar un compromiso con la energía verde. La creación de energía utilizando energía geotérmica no produce contaminación y es un gran paso hacia la creación de un medio ambiente limpio.
- Ventajas económicas: Puede afectar a una serie de industrias, incluidas la agricultura, el turismo y la construcción. La creación e instalación del sistema utilizado para adquirir esta energía es otro impulso para la economía, ya que produce puestos de trabajo en una variedad de áreas. Es aproximadamente un 80% más barato producir energía utilizando energía geotérmica que los combustibles fósiles, lo que la convierte en una solución mucho más económica para nuestras crecientes necesidades de energía.
- Emisiones reducidas: No produce humo, monóxido de carbono u otras emisiones nocivas. Esto también lo convierte en una opción más segura para la calefacción. De hecho, el agua calentada naturalmente puede bombearse directamente a la casa para bañarse, preparar alimentos o calentar la casa u oficina.
- Conveniencia-No hay limitación geográfica para la instalación de bombas geotérmicas. El equipo se puede producir localmente y se puede usar en casi cualquier lugar. Esto lo convierte en una buena opción de energía en una amplia gama de aplicaciones en casi cualquier lugar de los Estados Unidos.
- Funcionamiento silencioso: Los sistemas geotérmicos tienden a funcionar silenciosamente, lo que los hace altamente deseables en varios entornos. Un sistema puede durar más de 20 años, lo que lo convierte en una inversión sólida, así que no permita que el impacto de la pegatina le impida hacer el cambio a la energía geotérmica si se ofrece.
Usos prácticos De la energía geotérmica
Actualmente, la energía geotérmica es la tercera más utilizada entre los servicios de energía renovable. Ocupa un lugar más alto que la energía eólica y solar en términos de uso. Podemos utilizar la energía geotérmica de diversas maneras, entre ellas:
- Energía geotérmica directa: El agua caliente se puede bombear directamente a tuberías para calentar hogares u edificios de oficinas. El proceso utiliza el calor del agua y devuelve el agua enfriada a un pozo para ser recalentado y utilizado nuevamente, lo que lo convierte en un recurso verdaderamente reutilizable.
- Bomba de calor geotérmica: el agua subterránea mantiene una temperatura constante entre 50 y 60 grados Fahrenheit. Esa agua se bombea a través de tuberías que corren por debajo de edificios y casas, donde el calor se elimina del agua y se sopla hacia la estructura. Podemos revertir el proceso durante el verano y llevar el calor fuera de las casas y edificios y al suelo para ser absorbido naturalmente.
Tres tipos de Plantas de Energía Geotérmica
Los Estados Unidos no funcionan únicamente con centrales de energía nuclear o de combustible fósil. También tenemos varias plantas de energía geotérmica. Así es como funcionan:
- Vapor de destello: se eleva agua muy caliente de pozos profundos donde la temperatura está entre 300 y 700 grados Fahrenheit. Parte del agua se convierte en vapor y alimenta las turbinas que generan energía. A medida que el vapor se enfría y se condensa, se devuelve al suelo en forma de agua.
- Ciclo binario – Una vez más, se utiliza un intercambiador de calor. Esta vez lo usamos para transferir agua moderadamente caliente a isobuteno u otro líquido que hierva a temperaturas más bajas, y el vapor resultante alimenta turbinas que generan energía.
- Plantas de vapor seco: El vapor se puede canalizar a generadores directamente desde depósitos geotérmicos para hacer girar las turbinas que generan energía.
No es una práctica nueva
El uso de energía geotérmica para calentar el hogar, bañarse y preparar alimentos no es una tecnología nueva. Nuestros científicos están continuamente ideando nuevas formas de ponerla en uso, pero la energía en sí se ha utilizado durante siglos. Los antiguos romanos usaban las aguas termales para calentar sus hogares, disfrutar de baños calientes y cocinar sus alimentos. Y el primer sistema de calefacción geotérmica para uso residencial en los Estados Unidos se desarrolló en 1892 en Boise, Idaho.